Hoy en día, la calidad del aire cada vez cobra más importancia. Es por este motivo, que la Unión Europea pone cada vez más foco para lograr alcanzar los objetivos de 2020 para la protección del aire de forma sostenible. En este ámbito, surgen nuevas normativas que pretenden reducir las emisiones de los distintos tipos de motores, como la normativa Stage 5.
A raíz de este tipo de normativas, se convierten en imprescindibles las innovaciones técnicas necesarias por parte de fabricantes y empresas relacionadas, que se ven obligados a cooperar en aras del desarrollo de nuevos productos y tecnologías más eficientes que contribuyan positivamente a la mejora de calidad del aire. Le contamos todo lo que debe saber sobre la normativa Stage 5.
¿Qué es Stage 5 o Stage V?
La Normativa Europea de Emisiones para maquinaria (NRMM) 2016/1628/CE o normativa Stage 5, entró en vigor el 1 de enero de 2019, modificando y derogando la anterior Directiva 97/68/CE que hasta la fecha regulaba las emisiones emitidas por maquinaria industrial.
Los motores son responsables de una parte considerable de la contaminación atmosférica por NOx. Aunque quedan exentas de regulación las emisiones de CO2 en esta normativa, se regulan dentro del Stage 5 las emisiones de CO, HC, NOx y partículas, estableciendo unos nuevos límites de obligado cumplimiento.
Esta normativa afecta a todos los motores de combustión interna para maquinaria, aunque el equipo no circule en vía pública, ya que constituyen una proporción considerable del total de emisiones antropogénicas de determinados contaminantes atmosféricos nocivos.
En concreto, en el sector de la manutención, esta normativa afecta a motores clasificándolos de la siguiente forma:
- Motores NRS: Motores de chispa-ignición, impulsados por gasolina o gas (propano, natural o butano) con una potencia menor a 56kW.
- Motores NRE: Motores de compresión-ignición (impulsados por combustible diésel) y motores de chispa-ignición con una potencia igual o superior a 56kW.
Esta normativa establece unos valores límite de emisiones, recogidos en las siguientes tablas, para los distintos tipos de motores:
Límites de emisiones de fase 5 para Motores NRS de encendido por chispa ignición
Fuente: REGLAMENTO (UE) 2016/1628 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 14 de septiembre de 2016
Límites de emisiones de fase 5 para Motores NRE de encendido por compresión-ignición
Fuente: REGLAMENTO (UE) 2016/1628 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 14 de septiembre de 2016
¿Cómo afecta a los consumidores?
La nueva normativa de regulación de emisiones implicará nuevos desarrollos por parte de los fabricantes. Las nuevas tecnologías requeridas implicarán un mayor coste en motores, lo que consecuentemente incrementará el coste del producto.
En este contexto, muchos fabricantes deciden cambiar el proveedor que les suministra los motores de las carretillas elevadoras, lo que genera una complejidad añadida en la gestión de piezas de recambio y los servicios de mantenimiento.
Los fabricantes no podrán fabricar máquinas más allá de junio de 2020 con motorizaciones que no cumplan normativa Stage 5 y estas deberán ser comercializadas (puestas en marcha) durante el resto del año 2020, fecha en la que finaliza el período de transición de los motores y maquinaria del sector de la manutención.
Hay que tener en consideración, que el cumplimiento de esta normativa es responsabilidad del fabricante, por lo que cualquier máquina puesta en marcha con la normativa actual vigente no deberá ser actualizada durante toda su vida útil, sin generar costes añadidos al cliente.
El enfoque de Toyota Material Handling a la nueva normativa
Toyota Material Handling es el único fabricante de carretillas elevadoras y tractores de arrastre que fabrica sus propios motores industriales. La estrategia de Toyota frente a esta nueva normativa, es seguir apostando por nuevos desarrollos en carretillas de combustión interna cada vez más eficientes y con menores niveles de emisiones, además de minimizar el coste total de la propiedad.
Paralelamente, el desarrollo de las carretillas contrapesadas eléctricas, se ha dirigido hacia la realización de equipos que garanticen las prestaciones de robustez, potencia y fiabilidad con el objetivo de sustituir con garantías los modelos de combustión interna en aplicaciones pesadas muy intensivas.
En cuanto a tractores de arrastre, también regidos por la misma normativa, se decide apostar por una gama de vehículos 100% eléctrica puesto que sus especificaciones cubren sobradamente las de sus antecesores con motores de combustión.
Fuente: Toyota Material Handling.